Veremos porqué los equipos requieren distintos tipos de grasas, y cómo la viscosidad es el factor más importante a considerar al momento de escoger una grasa.
Muchas veces nos han preguntado:
“¿Porqué no podemos utilizar la misma grasa para varias aplicaciones?”.
Como ejemplo; de la misma forma en que no se pueden usar las mismas llantas de un auto para una máquina de construcción, pues, un solo tipo de llanta no se adapta a todos los vehículos; de la misma forma una grasa no se adapta a todos los equipos.
Cada equipo opera en condiciones distintas.
Al momento de escoger una grasa se deben considerar factores como:
Contaminación por agua (equipos operando en condiciones húmedas).
Temperatura de trabajo.
Velocidad
Carga o presiones de carga.
Fórmula:
La viscosidad 220 es la más común para múltiples aplicaciones y es considerada como la normal para una grasa multipropósito.
Para aplicaciones de alta velocidad como son los motores eléctricos se requiere una viscosidad de ISO 100. Recuerda…
Para velocidades muy bajas y para carga alta, se recomiendan viscosidades de 460, por lo tanto:
Hay otros factores a considerar en las grasas como son:
El espesor
Grado de aleación
Pero la viscosidad siempre será el factor más importante a considerar.
Donde usar una grasa
En aplicaciones en donde se requiera que no ocurran filtraciones / escurrimientos.
Donde se necesita la acción de sellado a través de la grasa.
Donde se requiera una mayor película de lubricación.